jueves, 7 de mayo de 2009

Amigo lector

Antes de seguir con este blog, tengo que explicar varias cosas. Cada película fue buena en su época y aunque con el paso de los años se hayan quedado antiguas no quiere decir que no sigan siendo buenas. Por ejemplo, una comedia es muy fácil de hacer en cualquier época de la historia, sólo necesita buenos actores cómicos. Pero una película fantástica, de ciencia ficción o de terror no era tan fácil de hacer en los años 70 como en el siglo XXI. Hay películas de terror, en mi caso de zombis, que vale más el trasfondo de la película, el guión, los planos de cámara y la música que los efectos especiales en sí. Podemos comparar dos películas iguales. La noche de los muertos vivientes (que comentaremos más adelante) se rodó por primera vez en 1968. Los efectos especiales eran alucinantes, pero comparados con los que había en su época, sobretodo contando con que en 1968 las películas eran en blanco y negro. Esa misma película la rodó el mismo director en 1990 con los adelantos de efectos de esa época, la película ganó mucho en visual, pero los amantes de esa película y director nos quedamos con la primera versión porque realmente daba miedo, aunque los efectos fueran algo peores, porque realmente estaban estupendamente bien hechos, contando con lo que tenían que era todo básicamente maquillaje y nada de ordenadores.
Lo que quiero decir aquí, amigo lector, es que cuando hablo de una película de zombis de los años 30, 40, 60 o 70 y bajo mi perspectiva sea una gran película llena de tensión, lo que no quiero es que nadie se equivoque, no vas a encontrar una película de zombis tipo Resident Evil (que también comentaré) o Amanecer de los muertos (2005) o películas trepidantes de ese tipo, porque en aquellas épocas las cosas en el cine eran diferentes. Hoy en día está todo visto y nada sorprende, pero en años pasados cuando la gente era aún inocente, no existía internet y las comunicaciones brillaban por su ausencia, una película de terror con pocos efectos especiales que tuviera, realmente (y perdón por la expresión) acojonaba y mucho.
Sólo quiero que disfrutes de estas humildes páginas y si te gusta este tipo de películas no hagas demasiado caso de mis críticas porque para gustos están los colores y una película mala para mí, puede ser buena para ti y en ese caso me encantaría que me lo dijeras. Muchas gracias.

1 comentario:

  1. Muy cierto, las cosas cambian, y la gente también, al menos en la superficie.

    Y digo que por lo menos en la superficie, porque por debajo hay cosas que no cambian nunca: el miedo a algo que no se ve, el miedo a perder lo que nos hace humanos, la desesperación de ver la salvación casi al alcance de la mano y no poder llegar.

    Las películas que tienen esas cosas son, y serán, buenas siempre. Otras, simplemente, son lo que se puede hacer con los medios del momento, y pierden todo el sentido cuando esos medios quedan superados.

    Siga usted, Señora Zombiemasteresa, diseccionándonos, o mejor, viviseccionándonos estas películas. Mucho ánimo.

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